Castigado 2 meses a estar encerrado en una caja por hablar por el móvil

En Tres Cruces (Bolivia), un padre ha tenido encerrado a su hijo durante 2 meses en una especie de caja por haber hecho una llamada telefónica, debido a que su religión les prohíbe el uso de las nuevas tecnologías.

La caja fue fabricada por el propio padre, en madera, y apenas tenía 3 metros cuadrados de suelo y 2 metros de alto. Según la explicación del padre, el joven "pretendía usar el móvil además de utilizar la radio y en su comunidad esta prohibido usar la tecnología por no profesar la religión de su comunidad". El padre del joven ha explicado que su intención era mejorar el comportamiento de su hijo ya que anteriormente lo habían llevado a una clínica psiquiátrica pero no presentó ningunas mejoría.

La fiscalía liberó al joven y ahora acusa al padre de vejaciones y tortura. Sin embargo, el joven ha asegurado nada más salir de su cautiverio que quiere vivir en su casa aunque ansiaba que su encierro finalizase.

La comunidad a la que pertenece tal familia es llamada "menonitas", y se encuentran la localidad de Tres Cruces, perteneciente a Santa Cruz, a unos 590km al este de La Paz (capital boliviana).


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